
Hola
Contigo nunca he dejado de intentar lo imposible, a sabiendas
de creer que era del todo improbable volver a tener aquello que fuimos. Entre
aquel tú y este yo hay un inmenso abismo. Yo te he llorado como si hubieses
muerto y en cambio tú me has olvidado como si nunca hubiera existido.
Y aunque lo sé vuelvo a caer en la inercia de llamarte. Y a
la desesperada te hago una señal para llamar tu atención una vez más. Se me
están acabando las ideas para crear escenarios pretendidamente casuales en los
que encontrarme contigo. Tú me rehúyes y yo te persigo incesantemente. Pero ni
tú eres la misma persona que quise tanto ni yo soy la chica que dejaste un día
de octubre. Llovía aquella tarde sobre nuestras cabezas y sobre mi alma. Sentía
que el agua mojaba mi pelo pero no quería moverme de tu lado. Y allí se quedó
para siempre una parte de mí, que nunca regresó conmigo. Sigo siendo la chica
de aquel jueves que vio cómo su último tren salía para la ciudad del olvido.
Tú continuaste con tu vida, como si nada. Tenías razón:
olvidas pero no perdonas. Yo, precisamente aquel día en que la lluvia mojaba mi
tristeza, pensaba que nunca me había muerto tantas veces en una sola tarde.
Cada una de tus frases era un puñal en mi estómago. Estaba desgarrada, tocada y
muerta y tú seguías hablando de lo importante que eran tu otra vida, tus amigos
y tu trabajo. Todo era más importante que yo y me culpabas por no entenderlo.
Por no entender ni aceptar que me había convertido en tu mujer invisible.
Siempre serás el hombre equivocado y yo la mujer
imperfecta, pero fuimos y seremos tal para cual. Y sobrevivo con el dolor de
haberte querido, el daño que me provoca seguir haciéndolo y la tristeza de saber
por encima de todo que, pase lo que pase, y aunque sea invisible para ti, siempre
estaré a tu lado. (N.H.R.)
Hola. Soy nueva en este mundo de la escritura y me ha encantado esta entrada, me he sentido identificada.
ResponderEliminarSaludis de Ani
Muy bonito y me he sentido identificada.
ResponderEliminarEstoy empezando a escribir pequeñas historias en mi Blog.
Al igual que Coffela, yo tambien soy nuevo en el mundo de la escritura. Puedo decirte que me gusto mucho tu entrada.
ResponderEliminarQué bonito... me acabo de enamorar de tu blog y de tus palabras. Describes como nadie el dolor de la ruptura. Te sigo.
ResponderEliminarQué texto más sentido y más bonito... a veces yo también me siento invisible, pero no soy capaz de dar el paso y seguir mi vida ya fuera de este amor que no me corresponde.
ResponderEliminarprecioso y me identifico mucho. Gracias por escribir tan bonito lo que pienso.
ResponderEliminarYo también soy una mujer invisible y lo llevo muy mal. Gracias por darnos visibilidad a las que llegamos tarde a la vida de otra persona.
ResponderEliminarGenial en todos los sentidos
ResponderEliminar