Hoy, que me dio por pensar en ti... Volví a preguntarme por qué fuiste tan importante, si al final tampoco te diferencias tanto del resto, con tus dos ojitos, nariz, boca y un montón de ideas desordenadas en la cabeza. Mirándote detenidamente nada te hacía especial.
A lo mejor fue porque me dio por buscar un poco más a fondo, por intentar fijarme en las cosas que nadie ve, que son las que más me gustan a mí y las que para ti son insignificantes.
¡Qué bonitas son las cosas sencillas!: una sonrisa, un guiño de ojo, un “mañana te vuelvo a ver”, y qué bien sentaba escuchar tu voz antes de que los rayos de sol hubiesen aparecido. Una vez me dijeron que le felicidad era eso: apreciar los pequeños gestos, que al final son los que causan las mayores alegrías y lo que más echamos de menos cuando nos faltan ¿Verdad?
4 comentarios:
Muy sentidas tus palabras… nunca mejor leídas. Tanto así que de pasarte por la http://alaorilladelmaar.blogspot.com terminarías comprendiendo precisamente el motivo. Saludos… que tengas un buen día.
de verdad que tienes un blog precioso. seguiré leyendote. Te "robé" un texto. Felicidades.
PD. Veo temblar la columna de la izquierda debajo de "seguidores" navegando en chrome. Tu también? A mi me pasaba hasta que descubrí que es ese gadget de seguidores que a todo lo que tiene abajo lo hace temblar. Lo puse abajo del todo.jeje.
Lo dicho.... saludos y felicidades!!!
Me gusta c:
Me ha encantado, sobre todo el final!!
Publicar un comentario